Pues eso, que hace un mes que desembarcamos en Japón (mi estancia más larga ya, y con visos de dejar el record bien arriba). Me gustaría ir escribiendo entradas en esta serie a medida que van pasando los meses, y... ¡tal vez los años!
A día de hoy, mi vida aquí se ha estabilizado un poco, llegando a ser rutinaria una buena parte del día:
- Ir a la escuela
- Clases de japonés
- Cantidad de deberes
- Cenas raras cerca de la estación
- Retorno a casa a las tantas
- Vuelta a empezar
La rutina, estando en Japón, me viene bien. Me ayuda a centrarme en los estudios e ir pasando el tiempo lo más rápido posible (y pasa en verdad muy rápido). Antes de darme cuenta controlaré un poco este idioma endemoniado. Por ahora, soy capaz de pedir cerveza, que no es poco.
Y, para salir de la rutina, siempre tengo los fines de semana y los festivos. Y si con eso no es suficiente, ¡otra boda en un mes!
Así que ahí seguiremos, por lo menos un mes más. A ver si se nos sigue dando igual de bien...
jueves, 30 de abril de 2009
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2 comentarios:
No sé si irá mucha gente desde aquí al tu boda japonesa (ya sabes que yo no, por una cuestión de coherencia), para los que lo hagan, podrías hacerles una serie de recomendaciones sobre las costumbres, las normas de cortesía (sorber la sopa es lo correcto), etc.
Esto es por si no tenías deberes bastantes :-)
Hay que pensar eso con calma. No se si a los asistentes (seis en total) habrá que darles instrucciones a través del blo o en persona.
¡Por supuesto que alguna hayque dar!
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