Hace unas semanas nos fuimos a un centro de estos de bricolage a comprar flores para llenar la terraza. El año que pasó mi señora en España hizo que se vinieran abajo las que ella tenía. Así que, después de un par de visitas (con una no hubo bastante, la terraza es grande), nos hicimos con las florecillas.
Además impuse un poco mi criterio de comprar algo más que flores. Las flores dan una satisfacción visual importante, es verdad, pero otras plantas dan otras satisfacciones: las de comernos sus frutos, que no es poco.
Así, nos hicimos con una mata de tomates, una de pepinos, una de pimientos, una de fresas... Naturalmente, aún es pronto para poder disfrutarlas en condiciones, y nunca llegarán a ser nada demasiado grande (el tamaño de las macetas lo impide). Aún así, nos comimos dos fresillas el otro día que eran estupendas. Pequeñas, pero deliciosas. Y a esperar a las siguientes...
miércoles, 20 de mayo de 2009
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3 comentarios:
Pero bueno tio, ¿lo tuyo es una terraza o la huerta murciana?. Fotos del vergel porfa.
Xaxo, como te has convertido en un gran agricultor, joder, quien te vio y quien te ve, jeje, gracias tio
no, no, si son solo unas cuantas macetas. Y que conste que la que cultiva es mi señora, yo solo me papeo las fresillas, cuando salen.
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