Una vez trasladadas las oficinas al centro, y dada la necesidad de usar el metro todos los días, me he hecho con una tarjeta bip para usarlo más cómodamente (me recuerda a la 'máquina que hace bip' de los Monty Python en 'El sentido de la vida'):
Yo creía que, usando esta tarjeta, el viaje saldría (algo) más barato (aquí no hay abonos mensuales, ni billetes de diez viajes). No es así, y además hay que pagar la tarjeta. Pero si es más cómodo. Acercas la tajeta al torniquete (incluso desde dentro de la cartera) y te descuenta el viaje del saldo que has cargado previamente.
El precio de la tarjeta, 1100 pesos (menos de euro y medio). El precio del viaje, depende. En hora punta, 420 pesos, y en hora valle 380 pesos (ahora el euro está a 745 pesos).
Además, la terjeta bip es la única maner de montar en las 'micros' (autobuses urbanos). Esto es así para evitar atracos y chanchulletes varios por parte del personal. Nunca he cogido una micro, y no me importaría (viéndolas) irme de Santiago sin hacerlo.
miércoles, 5 de diciembre de 2007
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