jueves, 7 de octubre de 2010

TOYAMA, GOKAYAMA, SHIRAKAWAGO

Con todo el rollo de los Madrileños por el Mundo, que andaron por aquí hace unos días, me he retrasado en subir el post de mi fin de semana en Toyama. Mi señora asistía allí a un congreso, y aprovechamos para ir a ver las casas estilo gassho, que para algo son Patrimonio de la Humanidad.


Toyama es la prefectura (provincia) que está marcada en el mapa con color más oscuro. La ciudad de Toyama da al mar del Japón, al norte de la prefectura. Nuestra prefectura de origen, Hyogo, está marcada con un color más claro (Kobe está al sur de la misma, dando al Océano Pacífico). Las casas gassho están al sur de la prefectura (área de Gokayama) y en la prefectura adyacente por el sur, Gifu.


La cosa es que nos pusimos en camino un viernes, tomando el Thunderbird que conecta Osaka con Toyama. El Thunderbird es un tren muy cómodo, que te deja en Toyama en unas tres horas, creo recordar. No es un tren bala, pero es línea directa. El tren atraviesa túneles bastante largos y pasa al lado del lago Biwa, el mayor lago de todo Japón.

Una vez llegados a Toyama, lo que hicimos fue elquilar un coche por cuatro perras (promoción especial de los trenes JR). De ahí nos fuimos hasta la aldea de Suganuma, donde hicimos noche en esta casa de la foto:


El estilo de las casas se llama gassho porque en japonés se le llama gassho a la postura de rezar con las palmas juntas delante del pecho. Los tejados, tan inclinados debido a la gran cantidad de nieve que puede caer en esta zona, recuerdan esa postura.


Los tejados de las casas llevan las vigas sujetas entre si con cuerdas, sin usar clavos. Son muy flexibles y, en caso de ser tumbados por un temporal (no debe ser fácil) podrían levantarse otra vez, como si fuese una tienda de campaña.


También es de mucha importancia el brasero tradicional japonés. El humo proteje la madera de los bichos (en Japón otra cosa no, pero bichos...), y da resistencia a las cuerdas.


En ésta aldea había un par de museos del folklore local, con algunas cosas curiosas, como este calzado para la nieve.


Los arrozales estaban a puntito para la cosecha.


Los japoneses dan mucha importancia (MUCHA) a la humildad, y dicen que hay que saber inclinarse como el arroz...


La cena que nos dieron en el hotel no estuvo nada mal, aunque el sashimi de carpa no me entusiasmó...


La tempura si estaba superior, y con sake más...


A la hora de acostarse tocaba futón, como no podía ser de otra forma.


El desayuno no estuvo mal tampoco, pero eché de menos un café...




Después de desayunar nos pusimos en camino para ver más casas estilo gassho, en otros pueblos del valle.


En algunas el dueño se sienta al lado de la lumbre contigo, te convida a té, te cuenta la historia de la casa y hasta te canta canciones típicas de la zona, como fue este caso.


Estuvimos en cuatro o cinco sitios más, entre casas aisladas y otras aldeas, como Shirakawago. En ellas aprendimos un poco sobre lo que se hacía en este tipo de viviendas, como trabajar la seda o incluso la pólvora. Como Japón estaba en ese entonces cerrado al comercio con el extranjero, y en Japón falta uno de los productos de la pólvora (creo que el salitre) en forma de yacimiento mineral, lo obtenian dejando pudrirse ciertos hongos o vegtales, o algo así... La pólvora obtenida se usaba para pagar impuestos al señor feudal de la zona.

Otro de los usos de esta zona era como cárcel para algún rebelde que otro. Este es un ejemplo de celda que ha sido restaurada por los vecinos.


Y así es por dentro, con un muñeco que nos da idea de cómo debía ser estar ahí metido. Al menos en invierno y verano, un horror.


A medio día (nos habíamos levantado temprano), volvíamos a Toyama, ciudad "moderna". Hasta tranvía tiene...


Una vez llegados al hotel, comprobamos que la habitación no está mal, estilo moderno, claro. Pero estaba en esquina, en la planta trece... con unas vistas magníficas sobre lo que queda del castillo de Toyama...



En Toyama poco que ver, nada que contar. Mi mujer a su congreso y al acabar de vuelta a Osaka. Fue un muy buen fin de semana, muy interesante, y lo recordaremos con cariño.

1 comentario:

lucia dijo...

Que vida mas buena llevas ,
me ha encantado este viaje ,
me hago la idea de que he ido yo .