lunes, 28 de septiembre de 2009

CARNET DE CONDUCIR

Bueno, pues en solo seis horas (¡¡toma ya!!) me he hecho con mi carnet de conducir japonés. Tiene una pinta parecida éste que he encontrado por internet:


La cosa es que yo vine con un permiso de conducir internacional (válido por un año) expedido en España. Y creíamos que con eso valía, al menos por ahora. En una consulta a los de tráfico de aquí nos enteramos de que no, de que si estás aquí viviendo hay que hacer el trámite y agenciarse un permiso a la japonesa.

Así que allí nos plantamos, un día que teníamos libre, a las 8:30 de la mañana, con original y copias de carnet de conducir español y pasaporte, así como una traducción al japonés de mi carnet español. Cogimos un número (el primero) en la oficina donde se hace el primer trámite, y nos fuimos a desayunar, porque abren a las 9:00 o 9:30.

Una vez volvimos a la oficina, nos verifican que he vivido en España al menos durante tres meses después de sacarme el carnet de conducir español. Esto llevó un rato largo por dos razones:
1.- El funcionario confundió la fecha de expedición del carnet que tengo ahora (2008) con la fecha en la que lo obtuve por primera vez (1993, la que interesa a estos efectos).
2.- Resulta que por la fecha que andaba buscando el funcionario mi pasaporte es un caos de visados chilenos, argentinos, peruanos, japoneses y canadienses. Naturalmente, no van en orden, y trazar dónde estaba y cuando le llevó un rato, al pobre, que además lo estaba haciendo mal (porque buscaba alrededor de 2008, en vez de 1993).

Me preguntaron como fue mi exámen (aunque ellos tenían su propia información). Parece que tenemos cierto nivel en España, porque no hizo falta más que revisión de aptitud visual para validar que podían darme el carnet japonés. A eso de las 11:00 estábamos listos.

El problema es que, para darme el carnet, me juntan en un salón con todos los que se están sacando el carnet en el día (por el método tradicional de teórico y práctico). En el salón hay que estar a las 13:00. Pero la charla informativa nos la dan a las 14:00 (sin retraso, estaba planificado así). Allí nos cuentan que no hay que beber ni tomar drogas al volante, que hay que presentarse si te llama tráfico, lo que puedes conducir y lo que no, y una serie de cosas más.

Después nos ponen en fila para tomarnos foto, recibir los papeles provisionales que hemos ido acumulando a lo largo del día y hacernos el carnet. A las 14:30 nos ponen en fila y nos dan el carnet en cuestión (por fin), después de seis horazas. El total de la broma, entre traducción y tasas, es de unos 60€.

Como en Japón soy principiante me toca poner, durante un año, los simbolitos que lo indican (la "L" española, vamos), aunque los límites de velocidad son los mismos que para el resto de conductores (en España son menores). En japón se ponen tanto delante como detrás. El de delante va con una ventosa en el parabrisas. El de detrás es magnético, y se pega a la parte trasera del coche. Son tal que así:



Ya solo falta hacerse con el tema, que no es moco de pavo. Entre los coches sin embrague, los semáforos a la americana (aunque el semáforo esté pasado el cruce, tu te tienes que parar antes) y el conducir por la izquierda, la cosa tiene tela.

Lo de conducir por la izquierda no es demasiado complicado (al fin y al cabo, es por donde acabamos conduciendo en España en autovías), si no fuese por las glorietas (gracias a Dios no hay apenas), que se hacen al revés, y los giros, en los que hay que estar muy atento.

2 comentarios:

jose dijo...

Cuando estuvimos ahí contigo y nos llevaste en coche, me parecía confuso de cojones. Ahora acabo de volver a Londres e igual, cuando giras y eso el cuerpo te pide entrar por la derecha... cuidadín!

Anónimo dijo...

Sí ten cuidado, porque un día, llegará un momento en que te preguntarás si vas bien (si irás) y decidirás que no.